La gran mayoría de los delitos se resuelven mediante métodos de investigación tradicionales, como declaraciones de testigos, pruebas físicas y análisis forenses. Si bien los psíquicos a veces pueden hacer predicciones precisas o proporcionar información útil, es probable que estos casos se deban al azar o la coincidencia, más que a habilidades psíquicas genuinas.
Es importante abordar las afirmaciones de habilidades psíquicas con escepticismo y confiar en la evidencia científica y el pensamiento racional al investigar y resolver crímenes.