Algunas personas pueden experimentar lo que se conoce como déjà vu, que es un sentimiento de familiaridad con una nueva situación o experiencia que parece haber vivido antes. Sin embargo, la investigación científica ha atribuido el déjà vu a anomalías cerebrales o cambios en la forma en que nuestro cerebro procesa la información.
Es importante comprender que, si bien los sueños pueden ser significativos y ofrecer información sobre nuestro yo interior, no poseen poderes místicos ni la capacidad de predecir el futuro.