Si bien los sueños pueden proporcionar conocimientos profundos, conocer el futuro basándose únicamente en los sueños carece de evidencia científica. Los sueños son principalmente el procesamiento subconsciente de emociones, pensamientos y experiencias sensoriales de nuestra vida diaria. Los sueños pueden ser expresiones imaginativas de esperanzas, miedos o preocupaciones, pero no deben considerarse predicciones objetivas sobre el futuro. Son parte de la actividad cerebral humana normal y, a menudo, reflejan nuestras experiencias conscientes, en lugar de permitirnos mirar hacia el futuro.