La vida de Junípero Serra comenzó en la isla mediterránea de Mallorca como Miguel José Serra y Ferrer. Poco se sabe sobre sus primeros años excepto que estuvieron marcados por la enfermedad. Su mala salud, sin embargo, no lo detuvo. Serra creció en un ambiente religioso y mostró una profunda espiritualidad desde temprana edad. Aunque vale la pena señalar que los detalles sobre su adolescencia siguen en gran medida sin documentar. Su familia vivía con sencillez, lo que contribuyó al desarrollo de la naturaleza humilde y compasiva de Serra.