He aquí por qué:
* Los fantasmas no están científicamente probados: La existencia de fantasmas no es respaldada por ninguna evidencia científica.
* La percepción del color es un fenómeno biológico: Nuestra percepción del color se basa en cómo se iluminan nuestros ojos y cerebros. Los fantasmas, al ser entidades no físicas, no tendrían los mismos mecanismos biológicos para percibir el color.
Por lo tanto, la idea de que los fantasmas se sientan atraídos por los colores brillantes es simplemente un concepto ficticio que no tiene base en la realidad.