Fantasmas Por lo general, se cree que son los espíritus de humanos fallecidos que no han pasado a la otra vida. Pueden estar apegados a un lugar o persona en particular y, a menudo, se les considera tristes, perdidos o enojados. Los fantasmas no son inherentemente malvados, pero pueden ser traviesos o incluso malévolos.
Demonios , por otro lado, son espíritus malévolos que no son de origen humano. A menudo se les asocia con la oscuridad, el mal y la tentación. Se cree que los demonios son agentes del diablo y, a menudo, se los considera poderosos y peligrosos. A diferencia de los fantasmas, los demonios siempre se consideran malvados.
En la cultura popular, los fantasmas y los demonios a menudo se representan como similares, pero existen distinciones importantes entre los dos. Por lo general, se considera que los fantasmas son más pasivos y tristes, mientras que los demonios son más activos y peligrosos.
En última instancia, la diferencia entre un fantasma y un demonio es una cuestión de creencia. Algunas personas creen tanto en fantasmas como en demonios, mientras que otras creen sólo en uno u otro. No existe evidencia científica que respalde la existencia de fantasmas o demonios, pero continúan fascinando e intrigando a personas de todo el mundo.