- Sin evidencia científica. No existe evidencia científica que respalde la existencia de fantasmas. A pesar de siglos de investigación científica, ningún experimento ha podido detectar o medir un fantasma.
- Leyes de la naturaleza. Las leyes de la naturaleza, tal como las conocemos, no permiten la existencia de fantasmas. Los fantasmas suelen describirse como entidades que pueden atravesar paredes, desafiar la gravedad y aparecer y desaparecer a voluntad. Estas cosas violan las leyes fundamentales de la física.
- La navaja de Occam. La navaja de Occam es un principio de la filosofía que establece que la explicación más simple de un fenómeno suele ser la correcta. En el caso de los fantasmas, hay muchas explicaciones más plausibles para los avistamientos de fantasmas reportados, como alucinaciones, identificaciones erróneas o engaños.