Los investigadores de fantasmas investigan lugares supuestamente embrujados, así como otros fenómenos inexplicables de los cuales los fantasmas forman un subconjunto. Sin embargo, la mayoría de las veces estas personas se autodenominan investigadores paranormales, y muchos de ellos creen en la existencia real de fantasmas, aunque actualmente no existe evidencia científica objetiva y verificable de la existencia continua de espíritus o almas después de la muerte corporal.