Algunas razones comúnmente citadas por las que las brujas están asociadas con familiares incluyen:
Simbolismo: Los familiares pueden simbolizar la conexión de la bruja con el mundo de los espíritus, su conocimiento oculto o la creencia de que las brujas tienen la capacidad de comunicarse con los animales y controlarlos.
Asistencia y Protección: A veces se representa a los familiares ofreciendo asistencia práctica a las brujas, como recolectando ingredientes para hechizos, llevando mensajes o actuando como guardianes contra daños.
Potencia y control: Los familiares pueden mejorar el poder percibido de la bruja y el control sobre la naturaleza o ciertas fuerzas sobrenaturales.
Cambio de forma: En el folclore, se cree que algunos familiares cambian de forma, y a menudo toman la forma de gatos, búhos, cuervos u otros animales, lo que permite a las brujas permanecer ocultas o realizar ciertos actos mágicos.
Pacto de las Brujas: Los familiares a menudo se consideran el resultado de un pacto o acuerdo entre la bruja y un demonio o ser sobrenatural, y el familiar actúa como una manifestación del pacto.
Juicios de brujas y persecución: Durante los juicios por brujería en Europa y América del Norte, los familiares se utilizaban a menudo como prueba contra las brujas acusadas, ya que su existencia se consideraba prueba de brujería.
Es importante señalar que la noción de brujas y familiares tiene sus raíces en gran medida en el folclore, la superstición y las narrativas históricas. En los tiempos modernos, muchas personas ven estas representaciones como creencias simbólicas o ficticias en lugar de creencias literales.