Nigromantes Por lo general, se asocian con los muertos y con la resurrección de secuaces no-muertos de la tumba. También pueden tener poderes que les permitan drenar la fuerza vital de otros o maldecir a sus enemigos con enfermedades. Los nigromantes a menudo son vistos como malvados o corruptos, ya que están dispuestos a utilizar magia oscura para beneficio personal.
Brujos Son lanzadores de conjuros que han hecho pactos con entidades poderosas, como demonios o seres de otro mundo. A cambio de poder, los brujos deben obedecer las órdenes de su patrón y pueden verse arrastrados a conflictos fuera de su control. Los brujos pueden tener poderes que les permitan convocar criaturas de otros reinos, controlar mentes o desatar maldiciones devastadoras. A menudo se les presenta como moralmente ambiguos, ya que están dispuestos a hacer lo que sea necesario para lograr sus objetivos.
En términos de jugabilidad, los nigromantes y los brujos suelen desempeñar diferentes roles en un grupo. Los nigromantes suelen centrarse más en convocar y controlar súbditos, mientras que los brujos se centran más en infligir daño y controlar el campo de batalla. Sin embargo, puede haber cierta superposición entre las dos clases, y algunos nigromantes también pueden tener hechizos o maldiciones que causan daño, mientras que algunos brujos también pueden tener habilidades de invocación.
En última instancia, la elección entre interpretar a un nigromante o a un brujo se reduce a las preferencias personales y al estilo de juego. Ambas clases pueden ser poderosas y versátiles, pero ofrecen diferentes enfoques para el lanzamiento de hechizos y el combate.