1. Sombrero puntiagudo: Una de las características más emblemáticas del atuendo de una bruja es el sombrero puntiagudo. Por lo general, tiene una copa alta en forma de cono y un ala que se inclina hacia abajo.
2. Bata o Vestido Largo: A menudo se representa a las brujas con túnicas o vestidos sueltos. Las representaciones tradicionales muestran estas prendas holgadas y que llegan hasta los pies.
3. Colores oscuros: La ropa de las brujas se representa frecuentemente en tonos sombríos y oscuros, particularmente negro.
4. Delantal: Un delantal atado a la cintura es un accesorio común.
5. Capa o Mantón: Algunas representaciones añaden una capa o un chal, proporcionando un aire de misterio y ocultamiento.
6. Cinturón o Faja: A veces, el atuendo de una bruja puede incluir un cinturón o una faja alrededor de la cintura.
7. Joyas: En ciertas representaciones artísticas, las brujas pueden usar amuletos, collares, colgantes, aretes o anillos únicos adornados con símbolos ocultos.
8. Accesorios: Las brujas pueden llevar una escoba, un caldero, una varita mágica, hierbas, cristales, plumas o grimorios místicos para mejorar su caracterización.
Estos elementos de vestimenta se han arraigado tan profundamente en la cultura popular que continúan siendo la piedra angular de la estética de las brujas en diversos medios, literatura, películas y disfraces de Halloween.