- Viejo y feo: Las brujas a menudo eran retratadas como viejas, con piel arrugada, narices largas y barbillas afiladas. También se los representaba a menudo como físicamente deformes, con la espalda torcida o sin extremidades.
- Malvado y malicioso: Se creía que las brujas eran criaturas malvadas y maliciosas que usaban sus poderes con fines dañinos. A menudo se les asociaba con el diablo y se decía que podían lanzar hechizos, maldiciones y maleficios.
- Aquelarre: A menudo se creía que las brujas vivían en aquelarres, o grupos de brujas que se reunían para practicar su magia. A menudo se decía que los aquelarres estaban dirigidos por una bruja poderosa, o líder del aquelarre, que era responsable de enseñar a las otras brujas sus poderes.
- Asociación con animales: Las brujas a menudo se asociaban con ciertos animales, como los gatos negros, los búhos y los murciélagos. Se creía que estos animales eran familiares de las brujas o espíritus que las ayudaban a lanzar hechizos.
-Volar: A veces se creía que las brujas podían volar, ya sea usando una escoba o montadas en la espalda de un familiar.
Es importante señalar que estas representaciones de brujas a menudo se basaban en la superstición y el miedo, y no en ninguna evidencia científica. En realidad, las brujas no existen, y las personas acusadas de brujería en el Renacimiento eran a menudo víctimas inocentes de la paranoia y los prejuicios.