En la película de terror "Candyman", el personaje principal no suele matar personas a través de un espejo, sino que utiliza espejos como medio para manifestarse e interactuar con los personajes. La leyenda que rodea a Candyman implica invocarlo diciendo su nombre cinco veces frente a un espejo, y a menudo se lo representa apareciendo en reflejos o en superficies espejadas. Cuando Candyman aparece en el espejo, a menudo sirve como advertencia o presagio de su presencia mortal. Sin embargo, el acto real de matar generalmente lo lleva a cabo el propio Candyman y no a través del espejo.