Los lobos son animales sociales que viven en grupos estructurados llamados manadas. Las manadas suelen estar dirigidas por un par alfa dominante, que es responsable de mantener la estructura social del grupo y defenderlo de las amenazas. La pareja alfa suele estar formada por los miembros más antiguos y fuertes de la manada, y los demás miembros los respetan y obedecen. El resto de la manada está formado por lobos subordinados, que se clasifican según su edad, fuerza y experiencia.
Cooperación
Los lobos son animales muy cooperativos que dependen unos de otros para sobrevivir. Cazan, viajan y crían a sus crías juntas. Cuando cazan, los lobos trabajan en equipo para cazar presas y comparten la comida que capturan. También se protegen entre sí de los depredadores y de otras manadas.
Comunicación
Los lobos se comunican entre sí mediante una variedad de vocalizaciones, lenguaje corporal y marcas olfativas. Las vocalizaciones incluyen aullidos, ladridos, gruñidos y gemidos. El lenguaje corporal se utiliza para transmitir dominio, sumisión y otras señales sociales. El marcado olfativo se utiliza para marcar territorio y comunicarse con otros lobos.
Territorio
Los lobos son animales territoriales que defienden su territorio de otros lobos y de otros animales. El tamaño del territorio de un lobo puede variar según el tamaño de la manada y la abundancia de comida. Los lobos marcarán su territorio con orina, heces y glándulas odoríferas.
Reproducción
Los lobos son animales que se reproducen sexualmente y normalmente se aparean una vez al año. La pareja alfa es la única pareja reproductora de la manada y, por lo general, producen una camada de 4 a 6 crías. Los cachorros nacen en una madriguera y son cuidados tanto por el padre como por la madre. Los cachorros son destetados alrededor de las 6 semanas de edad y comienzan a cazar con la manada alrededor de los 10 meses.
Vida útil
Los lobos suelen vivir entre 8 y 13 años en estado salvaje. El lobo más viejo conocido en estado salvaje era una loba de 19 años que fue asesinada en Alaska. Los lobos pueden vivir más en cautiverio y algunos han alcanzado los 20 años.