Las muchas caras de Venus:flickr.com
Venus, Diosa del Amor, rige el Día de San Valentín. Sin embargo, se ha entrelazado demasiado en nuestra imaginación con Neptuno, la octava superior de Venus, el planeta del romance.
Juntos, estos dos planetas nos dan una perspectiva idealista "color de rosa" sobre el amor. Todo el mundo piensa que Venus representa el amor, la fidelidad y el romance, perfecto para el Día de San Valentín. La imagen real, sin embargo, nos da una historia diferente.
Los predecesores de Venus en la alineación de la mitología fueron Inanna e Ishtar, alrededor de quienes se desarrollaron cultos que adoraban a ambas diosas. Parte del panteón sumerio de dioses y diosas en la antigua Mesopotamia, gobernaron el amor sexual, la fertilidad, la prosperidad y la guerra. Ishtar en particular era conocido por ser "cruel y descarriado".
Avancemos a la mitología romana y Venus era la diosa de las prostitutas, aunque podía convertir los corazones de hombres y mujeres del vicio sexual a la virtud. En otras palabras, Venus gobernaba todos los aspectos del amor (piense en el término enfermedad venérea que se deriva de la palabra Venus).
En la mitología griega, Venus era Afrodita que gobernaba el amor sexual, el deseo, la belleza y la fertilidad. Se vio obligada a contraer matrimonio concertado con el "feo" Haphaestus, pero era vehementemente independiente y estaba constantemente en busca de un nuevo amante. Uno de sus amantes más familiares fue Ares, dios de la guerra, con quien más tarde se casó. Pero tuvo muchas aventuras y muchos hijos, Eros, Rodos, Hermafrodito y Aneas, por nombrar sólo algunos.
Así que el amor viene en muchas formas y en este Día de San Valentín, 14 de febrero de 2012, es importante celebrar todos los aspectos del amor. Si estás en un matrimonio o una relación convencional, regala rosas rojas, chocolates y champán en honor al amor. Pero si no lo eres, honra lo que el amor significa para ti, ya sea tu amor por lo Divino, el amor por los amigos y la familia, incluso el amor por un buen libro. No te limites por lo que se ha convertido el amor. El amor es inmenso e inconmensurable y plantea uno de los mayores enigmas de nuestro presente. Pregúntale a cualquiera "¿qué es el amor?" y todos tendrán una respuesta diferente y con razón.